El momento de salir de mi zona de confort se acerca. Cada vez veo más de cerca el borde hacia el papel sin escribir. Cada día la confianza y el espíritu de aventura ganan terreno al miedo. El empoderamiento al victimismo y a la queja. Saber que solo yo puedo cambiar mi vida, y solo si paso a la acción. Y es posible cambiar, si, y pasar de la teoría a la práctica también! Soltar las creencias limitantes, dejar atrás viejos patrones, viejas estructuras que me hacen sufrir y a la vez me definen, o me han definido hasta ahora. Y por eso me cuesta tanto soltarlas. “¡Pero si ese soy yo!” – dice mi ego.
Y si lo miro desde el corazón, veo que es solo un vestido que me he puesto por un tiempo. Yo puedo ser todo, porque soy el vacío. Soy un lienzo en blanco en el cual ¡yo misma tengo la honra de poder pintar! Soltar los viejos cuadros de mis ancestros, después de reconocerlos y honrarlos, y atreverme a volver a pintarme de blanco, para de seguida poder llenarme de los colores y formas que yo deseo, y sentirme libre de empezar de nuevo a cada instante.
Hay procesos que lleban su tiempo… justo he vuelto a leer un poema sobre este tema, escrito hace más de medio año, Hoy elijo amar la vida (adiós viejo sofá). ¡Qué bien volver a recordar!
Y en este momento me llega un texto tan bonito, tan profundo, tan autentico… que he decidido compartirlo aquí con vosotros/as (con autorización de su autora).
No es mi intensión utilizar este blog para compartir escritos de otras personas, porque me encanta escribir y mi alma lo necesita. ¡Es la primera vez que lo hago! Es que al leerlo se movió mi interior más interno y empezó a saltar de alegría. Wow, justo lo que necesitaba escuchar, ¡en este momento!
Su autora, Ariadna Bailo, para mí es una maestra, una inspiración.
Hay muchos escritos que nos pueden inspirar. Charlas que nos motivan. Pero ella va más allá. Ella encarna, vive y practica todo lo que dice y escribe. Es una de las personas más integras y coherentes que conozco, o, como dice ella, comprometida con ella misma. La conozco de cerca, vivió por un tiempo en el pueblo al lado y sé que ella vive lo que predica.
Así que infinitas gracias Ariadna Bailo por existir y estar en mi vida. Sin nada más que añadir, ¡os dejo con ella!
Soltar
las creencias limitantes,
que nos hacen
dependientes
de una visión
distorsionada
de la aparente
realidad,
amparada
por una mente triste
y un corazón distante.
Soltar
el miedo
y la incertidumbre,
reiniciarme de nuevo
y vivir en el presente.
“No es fácil”,
tú dices,
porque lo “fácil”
es seguir como siempre:
repitiendo consignas
que me anclan
en la pseudo comodidad
que me creo
y así creo
mi realidad,
para así
no tener que cambiar,
releyendo entre líneas
en vez de profundizar.
“No es fácil
soltar”,
piensas,
soltar
lo que me define,
soltar
lo que creo que soy.
Vivir solo en el hoy,
saltar muros,
trepar vallas,
porque
vayas donde vayas,
el ego siempre
se inmiscuye.
Porque
lo intentas
mil veces
pero en realidad
no lo haces.
Soltar
el intentar constante,
soltar la intención
de crearlo
desde la auto obligación
de tener
que amarlo todo
cuando todavía no lo siento,
porque no viene de adentro
la llamada
a la gran transformación.
Por eso
soltar lo que no soy
y ver solo lo que hay
no es nada
que hoy
me dé seguridad,
ni que pueda integrar
con solo
pasar a la acción
queriendo substituir
lo que creo
que no me sirve:
es un acto de humildad,
de no querer controlar
lo que creo que va a pasar.
Soltar
es volar
alto
sin aparentemente
tener el soporte
incondicional
de la mente.
Y si
teniendo
miedo a la incertidumbre,
y soltando
el deseo
de que alguien alumbre
mi camino
o me lleve a mi destino.
Volar
y soltar
mis alas al viento
de la vida,
estando atent@
y sin ninguna prisa
por llegar
a ver de nuevo
Tierra firme
que me confirme
que soltarme
valió la pena.
Soltar
para poder encarnar
quien realmente soy
tiene el inmenso valor
de abrazar
solo hoy
la pura presencia
que solo desea amarme
y llenarme
y encarnarme.
Y,
desde ahí,
solamente
respiro
y me dejo ser
y habitar
en el eterno presente
que me sostiene.
Y
en el vacío,
confío.
¿Te llegó al corazón como a mí me ha llegado? Si quieres leer más poemas suyos, puedes entrar en su Facebook. Y ya sabes, me encantará leer tu comentario sobre soltar las creencias limitantes . ¡Hasta el próximo martes! Un abrazo de corazón,